La metodología, el método y la técnica

Creemos que muchos de los problemas que los profesionales deben resolver en el día a día podrían ser resueltos con mayor facilidad, si contaran, desde el vamos, con algún elemento que les permita, de alguna manera, transitar el camino del conocimiento con mayor seguridad.

Es por eso que pretendimos desarrollar, a lo largo de varias entregas, un análisis un tanto minucioso de los distintos pasos y elementos que todo profesional debe manejar a fin de poder resolver los distintos interrogantes que la realidad le plantea.

Por eso hoy, en esta entrega, comenzaremos analizando 3 conceptos fundamentales: la metodología, el método y la técnica. Esperemos que sea de su agrado.

La Metodología

Como consecuencia de la gran expansión y progreso de las ciencias, característica propia del siglo XVII, las cuestiones concernientes a la metodología comenzaron a adquirir importancia. Se hizo necesario desarrollar nuevos procedimientos e instrumentos para hallar el camino a la realidad.

Las mentes más lucidas de la época se preguntaron: ¿cómo hacer un abordaje científico de la realidad no distorsionado por factores objetivos y subjetivos que dificulten o perturben el conocer?

Bacon y Descartes se plantearon cuál podía ser el mejor camino para llegar a un conocimiento efectivo y a la vez riguroso de la naturaleza y para encontrar nuevos instrumentos que fueran vías de acceso a la realidad.

Bacon, en su libro “Novum Organum”, constituye una doctrina que procura resolver éste problema. Su autor lo llamó un “ars inveniendi”. Consideraba que el método científico era un conjunto de reglas para observar fenómenos e inferir conclusiones. Por lo que se inclinaba por el método inductivo.

Posteriormente, Descartes puso en cuestión a la duda como instrumento metódico de las vías tradicionales de abordaje de la realidad. No creía en la inducción sino en el análisis y la deducción.

Pero fue Galileo quien, con anterioridad, inauguró lo que se denomina método, por su modo de proceder en el estudio de la realidad. No se conformaba con la observación pura (teóricamente neutral) ni con la conjetura arbitraria. Propone hipótesis y las pone a prueba experimental.

Actualmente los problemas metodológicos han adquirido un amplio desarrollo como fundamentación teórica de los métodos y como estrategia de investigación.

El Método

La palabra método etimológicamente deriva de las raíces griegas metá (hacia, a lo largo), es una proposición que da idea de movimiento; y odos que significa camino. Por ello, la palabra método significa “camino hacia algo” o “persecución”, o sea, esfuerzo para alcanzar un fin o realizar una búsqueda.

De ahí que el método pueda definirse como: el camino a seguir mediante una serie de operaciones, reglas y procedimientos fijados de antemano de manera voluntaria y reflexiva, para alcanzar un determinado fin que puede ser material o conceptual.

De acuerdo con los fines perseguidos y con la naturaleza del fenómeno o hecho a estudiar, se aplicara uno u otro método. No existe un método único para cada fin, pero entre todos los métodos hay uno que es mas adecuado al fin propuesto. También hay métodos que son compartidos por diferentes ciencias.

La noción de método cubre varias significaciones. Se habla de método en sentido filosófico, refiriéndose al conjunto de actividades intelectuales que establece los procedimientos lógicos, las formas de razonar, reglas, etc, que permiten el acceso de la realidad a captar. Al ser esta acepción filosófica de la noción de método tal global y general se habla de muchísimos métodos a aplicar. Las escuelas filosóficas han reducido la enumeración de los métodos mencionando el método hermenéutico, el lingüístico, el empírico-analítico, el fenomenológico y el dialéctico.

Otro aspecto del método es que en cada caso en particular debe considerarse ligado al dominio específico del fenómeno a tratar; así se habla del método de la física, el de la biología, el de la sociología, y, a nivel de las tecnologías sociales, de los métodos del trabajo social, los de acción social, etc.

Cada uno de estos dominios comporta objetivos específicos y una manera de proceder. No hay un método científico aplicable a todo fenómeno pero existen requisitos básicos comunes a todo método científico.
Los métodos ayudan a una mejor utilización de los medios para acceder al conocimiento de la realidad, a fijar de antemano una manera de actuar racional y eficaz, a operar sobre la misma realidad y a evaluar los resultados de la acción, pero por sí mismos no llevan al conocimiento, a la acción mas eficaz, ni a la mejor manera de evaluar los resultados.

Un método es un camino, una guía, un modo de aproximación, no un conjunto de certezas. Ningún método es un camino infalible. Inclusive es necesario cambiar de método para el progreso científico. Si siempre se utiliza el mismo método debemos pensar en un estancamiento del conocimiento.

La Técnica

El método necesita procedimientos y medios que lo hagan operativo. Una de éstas herramientas son las técnicas.

Son respuestas al “como hacer” para alcanzar un fin o resultado propuesto, pero se sitúan a nivel de los hechos o de las etapas prácticas que, a modo de dispositivos auxiliares, permiten la aplicación del método, por medio de elementos prácticos, concretos y adaptados a un objeto bien definido.

Observando que el método es el camino o procedimiento general del conocimiento científico, las técnicas son los procedimientos de actuación concretos que deben seguirse para recorrer las diferentes fases del método científico.

Este alcance de la palabra técnica es el propuesto por el sociólogo Alfred Espinas designando con esta palabra a las prácticas concientes y reflexivas, en oposición con las prácticas simples o costumbres que se establecen espontáneamente con anterioridad a todo análisis. Por lo que ciertas técnicas, cuando no son utilizadas de forma rutinaria, lleguen a ser verdaderos instrumentos de ruptura con el conocimiento espontáneo para la construcción del conocimiento científico.

Los pasos principales del método científico

Consiste en establecer reglas o procedimientos generales que aseguren una investigación científicamente significativa.

- Formular correctamente el problema, descomponerlo.

- Proponer una tentativa de explicación verosímil y contrastable con la experiencia.

- Derivar consecuencias de estas suposiciones.

- Elegir los instrumentos metodológicos para realizar la investigación.

- Someter a prueba los instrumentos elegidos.

- Obtención de los datos que se buscan mediante la contrastación empírica.

- Analizar e interpretar los datos recogidos.

- Estimar la validez de los resultados obtenidos y determinar su ámbito de validez: implica hacer inferencias a partir de lo que ha sido observado o experimentado.

Esta enumeración no incluye absolutamente todas las tareas que comporta el proceso de investigación: el pensar científico no se reduce a un orden cronológico de operaciones concretas.

El método científico es un rasgo característico de la ciencia, tanto de la pura como de la aplicada. Si no hay método científico no hay ciencia. No es infalible ni autosuficiente. No puede operar en el vacío del conocimiento, requiere algún conocimiento previo que pueda luego reajustarse y elaborarse, y tiene luego que complementarse con métodos especiales adaptados a las peculiaridades de cada tema.

Ricardo
Sielas